Tips de crianza: Higiene bucal en bebés

¡Cómo le pica!

A los bebés les gusta llevarse las cosas a la boca, este es un reflejo natural e importante para su desarrollo. Durante los primeros meses de vida es la boca la que le permite conocer el mundo a su alrededor: texturas, sabores, su cuerpo etc. Más, también utilizan la boca y la succión para fines más prácticos: calmar su ansiedad y más adelante el dolor o picazón de sus encías.

A partir de los 6 meses a su bebé le comenzarán a surgir los dientes y ello le acarreará diferentes molestias al niño. Al principio será sólo una salivación excesiva, pues el cuerpo trata al diente como un pedazo de comida y produce saliva para intentar tragarlo. Sin embargo, poco a poco se le inflamarán las encías y esto le causará dolor y mucha picazón. Por ello el bebé se llevará distintas cosas a la boca intentando aliviar su malestar. Ofrézcale un mordedor o rasca encías frío, pues este tiene un efecto analgésico y antiinflamatorio. Enfríelos en el refrigerador. Jamás le dé un mordedor congelado a su hijo: el hielo puede quemar las encías.

Masticando diferentes materiales y formas, se estimula la membrana periodontal. Ésta se encuentra bajo los dientes debajo de los dientes y es la encargada de registrar todas las sensaciones que se manifiestan por medio de las mordidas. Al estimularla los bebés aprenden sobre la textura y dureza de los objetos cosa que les ayuda a controlar la fuerza de su mordida. Esto también favorece la identificación y familiarización con nuevos alimentos durante el destete. Por eso también es recomendable que el mordedor que use tenga diferentes texturas.

En caso de molestias extras consulte con su médico sobre el uso de algún medicamento tópico que también pueda ayudar.

Dientes pequeñitos y sanos

Cerca de uno de cada tres bebés menores de 3 años tiene caries. Esto se da principalmente porque existe la creencia de que los niños muy pequeños no deben cepillarse, pero no es cierto. Está comprobado que la falta de higiene bucal crea daños en los primeros dientes y que estos pueden incluso afectar a los posteriores dientes permanentes. Para ayudar a crear el hábito de limpieza dental en tu bebé desde pequeñito y crear familiaridad con el cepillo de dientes recomendamos el uso de cepillitos dentales de entrenamiento que se adapten a cada etapa del desarrollo oral de su bebé.

1. Cepillo rasca encías:

De mango grueso de fácil agarre, punta de goma elástica, que resulta agradable para las encías, y disco de seguridad para que el bebé no se haga daño. Ofrézcaselo cuando le estén saliendo los primeros dientecitos. El aprenderá a asociarlo con el placer de morder.

2. Cepillo dental de goma:

Más parecido a un cepillito normal, pero con cerdas de silicona suave que permiten limpiar entre los dientes, mango de fácil agarre cuello largo y cabeza pequeña. Ofrézcaselo a partir de los 11 meses para que juegue, por imitación, a lavarse los dientes mientras lo haces.

3. Cepillo dental para niño:

Con una forma igual de cómoda que los pasos anteriores, pero donde las puntas son de cerdas nylon redondeado que no dañan las encías del bebé.

Para evitar las caries no deje que su bebé duerma manteniendo leche en su boca, pues esto crea un ambiente perfecto para que aparezcan las bacterias que las causan. Si ocurre que él se

quedó dormido tomando pecho o biberón, puede suavemente recostarlo en una posición que le permita botar la leche de su boquita y luego recostarlo de la manera habitual para su hora de dormir.

Además de una adecuada limpieza, los dientes deben cuidarse por la alimentación: evitar el exceso de caramelos y dulces, tener una dieta rica en calcio y vitamina D. Las visitas al odontopediatra deben ser periódicas a partir del año.